miércoles, junio 14, 2006
Ayer, con la mirada perdida, sentada frente al mar y mirando sin ver nada, solo escuchaba el ruído de la olas, el aletear de las gaviotas y ese ruído que tanto me gusta, el tintineo de los mastiles de los veleros...
Mañana, veré amanecer como cada día, pero esta vez arropada por un pájaro, rodeada de nubes de algodón, que me llevará, como otras muchas veces a ... Dios sabe donde...
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8 comentarios:
Ay, cuánto me hubiera gustado estar asentado igual frente al mar... tin-tin-tin...
a mi me gustaría vivir cerca del mar... y tener una barquita..
Que envidia poder disfrutar del mar todos los días...
La foto la has hecho tú?? es preciosa!
No era mi intención daros envidia, solo compartirlo.
Giovanni, veo que ese tintineo, también te gusta.
Javi, el mar es maravilloso, pero hay que tenerle mucho respeto.
Willow, si la foto la he echo yo, pero no es de ayer, es del año pasado, hicimos un viajecito en ese velero. Fue muy divertido.
Gracias
que envidia me dás hijiña. No hay nada peor que ser de oceano y vivir en mares. Pero seguro que los despertares bajo cielos azules y olor de sal en los poros tras un viajecito en el velero, sientan de miedo.
La foto es preciosa, tas hecha una artista.
Un abrazo!
que lindo debe ser estar ahI!!!!!!!!!!!
muchos besos!
Todos los días me siento frente al mar y veo los barcos, a veces me gustaría partir en uno de ellos a tierras lejanas.
Buen viaje zapatitos, que disfrutes la travesía.
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